

Te descubrimos la receta de aceitunas en sosa para que puedas hacerla en casa… ¡y con un resultado para chuparse los dedos!
Como bien sabrás, las aceitunas tienen muchos beneficios para la salud, pero no pueden ser consumidas directamente después de haber sido recolectadas. Para ser aptas para el consumo, necesitan pasar por un proceso de curación que reduzca su amargor y las endulce.
Existen diferentes formas de conseguirlo, pero hoy nos centramos en la que probablemente sea el método más famoso: curar las aceitunas en sosa. Receta que hoy te contamos para que puedas ponerla en práctica en casa. ¡Vamos a ello!
Aceitunas con sosa cáustica: Receta paso a paso
1. Recoger y lavar las aceitunas
Cogemos la cantidad de aceitunas que queramos curar y las lavamos con agua. Una vez estén limpias, las dejaremos en un recipiente con agua durante 24 horas para que se hidraten.
2. Preparamos la sosa cáustica
Para el siguiente paso necesitaremos la sosa cáustica. Podemos encontrarla en la sección de limpieza de casi cualquier supermercado o incluso en ferreterías.
Es un componente químico altamente corrosivo que, gracias a esta propiedad, consigue suprimir el sabor amargo de la aceituna en toda su pulpa. Pero también debemos tener mucho cuidado a la hora de tratar con ella, pues si nuestra piel entra directamente en contacto con la sosa cáustica puede ocasionarnos lesiones o quemaduras, además de dañar la encimera u otro tipo de materiales.
Crearemos una solución de agua y sosa cáustica en la que más tarde añadiremos las aceitunas. Por cada kilo de aceitunas calcularemos unos 30 gramos de sosa.
Esta solución debemos prepararla en un recipiente de vidrio o cerámica por su alta resistencia.
3. Añadir las aceitunas con sosa cáustica
Una vez hayamos preparado la solución, añadiremos a ella nuestras aceitunas. En este paso lo más recomendable es usar guantes y gafas de protección, y realizar el proceso lentamente para que, al añadir las aceitunas, la sosa no pueda salpicarnos.
La sosa mezclada con agua debe cubrir por completo las aceitunas. Debemos evitar el contacto de ellas con el aire, por lo que cerraremos el recipiente.
4. Mover y reservar
Una vez introducidas, y durante las primeras 8 horas, debemos remover las aceitunas cada 2 horas. Es muy importante que, después de hacerlo, volvamos a tapar el recipiente.
Cuando hayan pasado estas primeras 8 horas, cogeremos una aceituna para comprobar cómo está evolucionando el proceso de curación. Para hacerlo, recuerda protegerte previamente con guantes aptos para el manejo de la sosa cáustica.
Para realizar el seguimiento de nuestra receta de aceitunas con sosa cáustica, a esta primera aceituna le realizaremos un corte. Comprobaremos cómo se ha formado una especie de anillo en la carne de la aceituna que, conforme pasan las horas, se va acercando más al centro, donde se encuentra el hueso.
Dicho anillo debe estar a ¾ del hueso para que demos por finalizado el proceso de curación. Si esta primera vez no está, seguiremos manteniendo las aceitunas en sosa y revisándolas cada hora.
5. Extraer y reposar en agua
Cuando el anillo que se ha formado ya esté a la distancia adecuada, extraeremos las aceitunas y la sumergiremos en agua durante 3 días. Debemos cambiar dicho agua 2 ó 3 veces al día para que se acaben de eliminar los restos de la sosa cáustica.
6. La salmuera
Para dar por finalizada nuestra receta de aceitunas en sosa, haremos la salmuera final. Para ello mezclaremos:
- 4 litros de agua
- 1 y ½ tazas de sal de cura
- 2 tazas de vinagre de vino blanco
Añádelas en un recipiente con las aceitunas. Déjalas almacenar al menos una semana… ¡y ya estarán listas para consumir!
Esperamos que esta receta de aceitunas con sosa te haya sido útil. Ya sólo queda una cosa: ponerla en práctica. También puedes acompañar esta receta con unos estupendos ajos en aceite, ya que le darán un toque especial a tu nuevo plato, y no dejará a nadie indiferente.
Aceitunas Chicón Lebrón como fabricante de aceitunas, conocemos muchas otras recetas de aceitunas ya que éstas pueden ser acompañadas en muchísimos platos.